Zoe Berenice
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Zoe llegó para cambiarnos la vida. Después del primer embarazo perdido, decidimos esperar, luego lo planeamos de vuelta y llegó ella.
Recuerdo que el test de embarazo que hicimos dio un resultado confuso y poco claro. Luego decidimos hacer el análisis de sangre, el cuál nos dio negativo. Un poco desilucionados en el momento; pero pasaron los días y el retraso continuaba, entonces decidimos ir al médico. Y fue grande la sorpresa, que Zoe ya estaba en camino a pesar de dar negativos los análisis. Comenzamos a soñar e ilusionarnos.
El principio del embarazo fue un poco delicado por un desprendimiento, mucho reposo hizo que el embrión se implante bien y hayamos superado el susto.
Zoe creció normalmente hasta las 30 semanas, dónde nos dimos cuenta que la presión arterial de mi esposa subió muchísimo, consultamos con el médico y nos indica ir a la urgencia. Ya ahí, nos quedamos internados. Unos días después, se debía interrumpir el embarazo.
Llegó Zoe, prematuramente y con muy bajo peso, con ciertas complicaciones y mucho trajeteo detrás de su estado. Luego de 54 días, le toca salir de la terapia y conocer el mundo exterior.
La llevamos a casa con mucho miedo, pero con mucho amor para brindarle, con muchas dudas pero con la certeza y la convicción de cuidarla de la mejor manera para no volver al frío lugar de la terapia.
Zoe cambió nuestro estilo de vida, cambió nuestra manera de dormir, nuestros horarios de descanso, de alimentación, cambió nuestra mente, nuestros corazones. Desde su llegada ella movilizó a mucha gente, quienes ya sentían un cariño por ella.
Hoy ella es una niña sana y muy feliz. Este album es una demostración que el amor todo lo puede. Ella nos regala todos los días esta hermosa sonrisa, sus picardías, sus travesuras. Hoy ella es toda nuestra vida. ZOE BEBÉ, TE AMAMOS.
